lunes, 21 de febrero de 2011

Protocolo neo-mama

Jueves, 10 de febrero de 2011: cita con el cirujano.
El doctor me explicó que en primer lugar hacen una punción y se analiza la muestra. Según los resultados de patología, que se obtienen al momento, se realiza la tumerectomía y se quitan los ganglios cercanos, estén o no afectados, para prevenir y realizar un estudio más concreto para los tratamientos posteriores.
Me explicó que hay diferentes tipos de cáncer y lo que suele hacerse normalmente, aunque había que esperar a analizar la muestra, para determinar si hay o no carcinoma y el tipo que  es.
Sea como sea, hay que realizar la punción.
Bien, le dije, vamos a ser claros. Según el radiólogo, esto pinta mal, entonces yo ya veo que esto no se quedará solo en una punción. Tengo 3 niños pequeños y necesito organizarme y planificar. No es lo mismo venir al hospital unas horas que varios días. Y le pregunté cuanto podría durar la hospitalización. Sí, dijo, pinta mal. El ingreso puede durar de 2 a 3 días si no hay complicaciones que no las suele haber. Se coloca un drenaje, aunque muchas veces los pacientes pueden irse a casa con él. Muy bien, entonces yo vengo con la idea de quedarme mínimo 3 días y si salgo antes, pues mejor.
Me solicitó una analítica, un electro y cita con el anestesista y quedamos pendientes de confirmar el día de la operación. A ver, dijo, me voy de vacaciones así que intentaré operarte el día 17, pero tengo que confirmarlo. Si no lo puedo hacer este día, te asignaré a otro compañero. Por mí, perfecto, estoy a la orden.  
Mi marido y yo salimos del despacho, con un montón de papelotes.  Ya sé que suena a tópico, pero tengo mucha suerte, me están atendiendo unos profesionales maravillosos. El miedo se ha ido de vacaciones, porque estoy en buenas manos, confío plenamente en ellos. Este crucero ha soltado amarras con el viento a favor, y llegará a buen puerto. Soy consciente que durante la travesía soplarán vientos del norte y habrá tempestades y tormentas, pero también sé que después vendrá la calma.
Mientras arreglaba las citas para hacerme el preoperatorio, ya me llamaban del hospital para confirmarme el día de la operación. El 17 de febrero debía ingresar en ayunas por el servició de urgencias. Ni tan solo hacía una hora que había salido del despacho del cirujano.
Llamé a la familia y a los amigos. Debíamos empezar a organizarnos. También llamé al cole de los niños. Consideraba que ellos debían saber la situación por varias razones: una, normalmente yo recojo a los niños del cole y mientras yo no pueda hacerlo, unos días irá mi hermana y otros la persona que pueda; dos, quizás si notan un comportamiento raro en ellos, pueden ayudarlos (estoy segura de ello) a expresar sus sentimientos si en casa no muestran su preocupación. Me entendieron perfectamente, y me ayudaron en cuanto al enfoque que debía seguir para darles la noticia, sobre todo a David, el mayor. Ojala, cuando acabe mis estudios, pueda trabajar en un colegio como este.  
Y así quedó mi agenda:
·         Viernes 11: analítica
·         Lunes 14: electro
·         Martes 15:
Ø  a las 9’00 enfermera para quitar verrugas a David (en realidad es un virus llamado molusco o algo así, pero así nos entendemos)
Ø  a las 15’30 anestesista.
Ø  Tarde de compras. Llovía a cantaros y me senté en una terraza cubierta a tomarme un café. Me encontré con un compañero y una compañera del trabajo. Charlamos, ella, además, había pasado por una situación similar. Me siento muy querida por la gente de mi alrededor. Un besito a los dos.
Ø  Noche: Llegó el momento de hablar con los niños.
Chicos, ya sabéis que la mami ha ido al médico para hacerse la revisión, igual que vosotros. Pues resulta que tengo una “verrugita” como las que te han salido a ti (David) y como las que tuvo Jordi. Pero la mía está por dentro de la piel y para quitármela me tienen que operar.
Bufffff!!!!! A veces los padres nos complicamos la vida y los niños son muy sabios y fuertes.
Mientras la mami esté en el hospital, iréis a dormir a casa de los abuelos con el papi. Y ellos tan contentos, los abuelos son un chollo, ¡Que vivan los abuelos!
De todas formas, sabía que David preguntaría, antes de acostarse empezó a disparar: mami, y te darán medicinas, y cuántos días estarás, y te cortarán, y que comerás, y si no te gusta, y………. fui contestando y aproveché para decirle que aunque no me gustara la comida, me lo comería todo, cualquier momento es bueno para soltar un sermoncillo.
Aunque de momento no creo que sospeche del cáncer, mis temores se deben a que conoce la enfermedad, el año pasado, estudiando el cuerpo humano, hablaron del cáncer de pulmón e incluso hicieron una campaña y recaudaron dinero para la Asociación contra el Cáncer. También, buscando información sobre rock, para la clase de música, entramos en la página web de Luz Casal y leyó: “concierto benéfico, 4 de febrero de 2011, Día Mundial contra el Cáncer” y sin pensárselo dos veces me dijo: mami, yo no quiero que tengas cáncer (fumo y eso le preocupa). Cariño, le dije, gracias, yo tampoco quiero tenerlo, pero mira, Luz Casal ha tenido cáncer y está bien. Lo que pasa es que para curarse necesita tomar unos medicamentos muy fuertes. Además, ya sabes que el abuelo tuvo cáncer y ahora, a veces está un poco pachucho por las medicinas que se toma, pero está bien. Os prometo que delante de él no habíamos hecho el más mínimo comentario y va, y me suelta esto mientras yo esperaba a que me hicieran la mamografía y la ecografía, precisamente para el día 4 de febrero de 2011. Bueno, no hay mal que por bien no venga. Si puedo evitar decirle que tengo cáncer de mama, lo evitaré, pero si me pregunta abiertamente, se lo explicaré con la mayor naturalidad posible, ahora ya sabe que el cáncer es una enfermedad mala, pero se cura.

·         Miércoles 16:
Ø  preparar la maleta de los niños y mi neceser.
Ø  A las 19’00 h. dentista David (programa PADI)
No fuimos al fútbol. Aunque quiero seguir con sus rutinas habituales, estaba agotada. Menos mal que el niño es un sol y dijo, ah, vale.
Deberes, baños, cena y a la cama.
No me costó dormirme, estaba tranquila y cansadísima.

No hay comentarios:

Publicar un comentario