miércoles, 7 de marzo de 2012

EFECTOS SECUNDARIOS


Hace tiempo que no cuento nada. No había nada interesante que mencionar. Aparentemente estoy muy bien, pero mi cuerpo o quizás mi mente no tienen tanta energía.
Mi médico de familia me comentó que al año, pasas a inspección médica o te da el alta. Parecía una decisión que estuviera en mis manos. Por mucho tiempo que llevara, concienciándome que debo empezar a trabajar, no lo tenía claro. Así que decidí hablar con mi oncólogo para hacerle dos consultas: una, tengo el pecho operado, más grande que el otro (y se supone que me han quitado un cacho), dos, que opina él sobre el trabajo.
A ver, que el pecho esté inflamado me parecía normal después de operación y radio, pero a estas alturas, pensaba que ya debería haber bajado. De todos modos no olvido las palabras del doctor: no te hago la mamografía hasta marzo porqué después de la radio pueden salir cosas que nos confundan. Bien, como el doctor estaba de vacaciones, hablé con la enfermera, y me comentó que si no estaba preparada que no pidiera el alta, total si los médicos de la inspección lo consideran oportuno, te la dan en un momento.
Así que, vi la luz!!!!!!. En lo que a este aspecto se refiere no tengo que decidir yo. Necesito hacerme una primera revisión después de todo el tratamiento. Si el oncólogo me dice todo perfecto, pues ¡ale! A trabajar se ha dicho. Pero necesito oír esas palabras. Es difícil describir lo que uno siente. No estoy deprimida ni me he pasado al bando del pesimismo, pero la carga emocional que el cáncer te regala, es dura. Siempre he sido muy activa y muchas veces me digo a mí misma, vamos, que antes en poco rato hubieras hecho 40 cosas. Ahora hago dos cosas en casa y estoy hecha polvo. Quizás sea una cuestión mental y que me digan, como el anuncio de Ausonia, que estoy recuperada, sea la clave para retomar mi activismo.
Hombre dicho todo esto, parece que esté todo el día tirada en el sofá sin salir de casa y ¡ja! ya me gustaría a mí. Con los niños uno no para ni un momento. Pero también es verdad, que ahora si estoy cansada, pues descanso. Muchas veces no me permitía un respiro, siempre pensando hay que hacer esto, hay que ir a comprar lo otro… hay que, hay que…….. hay que vivir. Muchas veces el cuerpo te avisa aunque uno no quiera escucharlo.

Bueno, a todo esto que, el día 2 me hice la analítica y la mamografía. Aunque pregunté si salía bien, la mujer me contestó que ya me daría los resultados el médico. Así que, deberé esperarme hasta el día 14.


Sigo mi relación diaria con el tamoxifeno. Se supone que controla las hormonas, pero yo creo que las vuelve locas. De repente me entra el sofocón y ¡ala! me pongo roja como un tomate y tengo un calor que ni en agosto. Creo que también afecta a mi paciencia (a ratos no me acuerdo de que exista esta cualidad) y si le preguntamos a mi marido sobre el humor, jeje, más vale que mienta como un bellaco que si no ......

1 comentario:

  1. Estimadeta Rosa!

    No hi han paraules per definir el que estàs sentint, perquè només tu ho saps. Crec, estic segura, que has estat una doneta molt valenta i, no ja pel que has hagut de passar i dinc passat perquè segur que a partir d'ara només serà un mal record, sinó per ser tan valenta com per compartir els teus sentiments amb tots/es nosaltres. No tothom n'és capaç.

    Dir-te que enhorabona per ser com ets i que les persones que tenim el privilegi de compartir algun moment amb tu som uns/es privilegiats.

    Petons, petons i més petons

    ResponderEliminar